Culturas tan importantes alrededor del mundo como los caldeos, egipcios y los hindúes creían fielmente que los números tenían un significado oculto y mágico.

Gracias a ellos esta tradición se heredó con el transcurso del tiempo a otras culturas. Muy claramente podemos ver esto en el cristianismo, que considera de especial relevancia números como el 7, el doce o el 666 entre otros.

Así surgió la creencia de que existen vibraciones alrededor de los números y que estas nos afectan directamente a cada uno de nosotros.

Por eso mostramos un interés con los números que tiene que ver con fechas importantes para nosotros, como la fecha de nacimiento, de la muerte, el matrimonio, número zodiacal y nuestro nombre, que dentro de la numerología también juega un papel importante.

En la astrología, donde cada casa tiene su número y la influencia de los planetas es importante a la hora de investigar nuestro número de la suerte.

Con frecuencia visitamos al astrólogo y numerólogo para que nos haga un estudio donde nos pueda revelar nuestros números de suerte para jugar al azar, casarnos, realizar algún negocio o un viaje, para saber si nos es conveniente o no.

Es importante saber por adelantado qué tipo de año nos espera. Cada año tiene sus propios poderes vibratorios. Con una formula muy sencilla podemos determinar el número de influencia en el año actual.

Para averiguar el número debemos sumar los números de nuestra fecha de nacimiento (día y mes) y la del año en curso.